domingo, 24 de julio de 2011

EL GRAN DESAFÍO EDUCATIVO:IMPARTIR SABERES PARA LA VIDA EN SOCIEDAD.

Hoy por hoy, en el escenario educativo se plantea una cuestión crucial:La escuela¿Educa para la vida social o solamente transmite conocimientos que son necesarios para escalar dentro de los distintos niveles de enseñanza?La respuesta es:Es necesario que la escuela plantee una educación para la vida en sociedad, para la cotidianeidad del alumno, para que éste último sea capaz de lograr su inserción social, a efectos de que sepa intervenir de manera eficaz para aportar soluciones a problemáticas que se generan en el medio social.
La escuela debe impartir saberes ligados a cuestiones rutinarias de la vida en sociedad, para que el sujeto sepa desenvolverse ante casos reales que se suscitan en el escenario social. ¿Cómo se logra esto?: Brindando un conocimiento basado en casos reales que se producen en el contexto social, incitando a que los educandos planteen posibles caminos y soluciones ante las diversas situaciones que se plantean en la realidad que subyace más allá del espacio áulico (es decir, la realidad que implica vivir y desarrollarse en el marco de la sociedad).
La escuela debe brindar la enseñanza de contenidos educativos no basados en sentido estricto de abstracciones intelectuales y esto no implica subestimar el saber teórico, sino que es fundamental incorporar en los planes de estudio la impartición de conocimiento relacionado con la cotidianeidad de vivir en sociedad, ya que muchas veces los alumnos son exitosos dentro del muro del edificio escolar(obteniendo buenas puntuaciones en exámenes y promoviendo al nivel siguiente)pero cuando debe salir al terreno social experimentan fracaso o rechazo, dado que en nuestro tiempo actual el déficit que presenta la escuela consiste en que la misma educa solamente para obtener calificaciones en diversas asignaturas, para promover de año o de grado simplemente, pero no tiene en cuenta que la vida prosigue extramuro(más allá del espacio escolar, es decir, en el tejido social) en donde generalmente la teoría enseñada en la sala de clases difiere de la praxis concreta que supone el hecho de desenvolverse socialmente, dado que el individuo debe intervenir en la realidad concreta para tomar decisiones y aportar soluciones puntuales ante un escenario problemático.
No se trata de cargar sobre la escuela tareas que deben resolverse en el contexto sociopolítico, pero sí es necesario que la institución educativa se adapte a la realidad que se vivencia socialmente, ya que sino se caería en el error de creer que en los establecimientos escolares solamente debe impartirse conocimientos que sólo tienen como campo de aplicación el aula escolar pero que se desconecta de la realidad que presupone vivir en una sociedad. Por eso, el desafío de la escuela consiste en transmitir saberes para la vida social, para que el sujeto sepa desenvolverse en la interacción con sus pares en el tejido social.
Educar para la vida en sociedad supone el replanteo de los planes de estudio, producir nuevos contenidos de la enseñanza que promuevan la integración entre teoría(conocimiento intelectual)y práctica(la cual supone la existencia de un campo de aplicación de conocimientos ante casos reales y problemáticas derivadas de éstos últimos).
Educar para la vida en sociedad supone no abandonar totalmente el espacio áulico, pero sí salir del mismo de vez en cuando, a efectos de que el alumno experimente el contacto con el mundo real que supone el medio social.
Educar para la vida en sociedad implica la aplicación de estrategias didácticas que tengan como premisa que el alumno:indague, investigue, cuestione y reflexione acerca de cuestiones ligadas a la realidad que se vislumbra en el espacio social.No se busca formar un alumno como receptor pasivo de conocimientos, sino que se mantenga activo, sabiendo cómo emplearlos, es decir, cómo transferir el saber a un contexto concreto de intervención.
Educar para la vida en sociedad supone que el alumno se comprometa profundamente con la realidad(social), explorando en ella para que sepa cómo actuar ante la cual, para que sepa diagramar cursos de acción ante determinadas cuestiones y/o problemáticas específicas.
Educar para la vida en sociedad se relaciona con la necesidad de que el docente se transforme en un guía y orientador de su alumno en la tarea de exploración de la realidad suscitada en la esfera social.Además, el docente debe bregar, desde su labor pedagógica, por promover el desarrollo de la capacidad operativa y ejecutiva del educando, a fines de que éste último sepa cómo intervenir en el campo de la sociedad.
Lic.Luis Alberto Russi Gerfó.
www.pedagogiaholistica.com.ar

No hay comentarios:

Publicar un comentario